Una compañera de mi hermana del hospital, me encargó una tarta para una amiga que acababa de dar a luz. Había tenido un bebé y se llamaba Quique. Lo mejor de todo es que querían que el bebé fuera un poco rockero, ya que al papá de Quique le encanta Elvis.
Así que nada manos a la obra y esto fue lo que salió.
El bizcocho era un brownie de 18 cm, relleno de ganaché de chocolate y mermelada de fresa, una combinación que le encantó a Carmen, la chica que me encargó la tarta.
Hasta la próxima entrada, besitossssssssssss.